Esta semana ha hablado Carlos Hita, el hombre fuerte del Ayuntamiento en el Consejo de Administración del Decano. Por lo que puedo entender de sus palabras, abril parece un mes importante. No me gusta dar fechas, porque si algo nos ha enseñado esta crisis albiazul es a incumplir fechas premeditadas –en el pasado por Comas y en el presente por los problemas que el propio Comas ocasiona y la dificultad de la gesta-. Pero es cierto que el tiempo se acaba y sí existe un horizonte claro: el 30 de junio. Con el equipo a falta de encarrilar la permanencia y siendo uno de los mejores de la segunda vuelta, se echan en falta noticias institucionales.
El pliego de condiciones de venta pública y el acuerdo con Hacienda son los dos objetivos, que van estrechamente relacionados, para la supervivencia del Decano. No sé realmente si será este mes, o el próximo, o apuraremos a los últimos días de junio por esa costumbre que tenemos de acercarnos al infarto. Pero este año ya no valen campañas de salvación y el Ayuntamiento, como propietario del club, debe buscar la fórmula a través de terceros para ingresar la cantidad que desbloquee las cuentas. Los buenos resultados actuales anestesian un poco nuestro día a día, pero las palabras de Carlos Hita, que sin decir mucho dan cierta lucidez a los siguientes pasos, y el interés de los propios jugadores que han manifestado querer quedarse en el Decano si la situación se normaliza, son cosas buenas para el optimismo general.
Aquí seguimos esperando, impotentes, expectantes, a que llegue la buena nueva. Ya no depende de nosotros. Para destensar un poco al que esté preocupado, que piense en los siguientes trámites: la auditoría forense debe terminar en un tiempo –es extensa, porque el club es un caos, y de ahí saldrán responsabilidades de anteriores dueños-, también la auditoría “tradicional” encargada esta semana, una nueva Junta de Accionistas… En definitiva, nos quedan pasos que dar.
Si hablamos de fútbol y dejamos lo institucional, el partido de éste sábado ante el Mérida promete ser bonito. Parece que habrá muchos extremeños que se acercarán a nuestra ciudad, y en caso de victoria, el Recreativo podría prácticamente tener la permanencia en su mano. Ganar siempre está bien, por supuesto, pero si esta semana conseguimos los tres puntos prefiero que sea exclusivamente por nuestros méritos antes que por un garrafal fallo del rival. Más que nada por la palabrería en algunos lares de los amaños y el feísimo caso del Eldense. Necesitamos ganar a golazos y jugadones, no vaya a ser que alguien retorcido nos quiera meter en el saco de un tema muy feo. Que alguno habrá.
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