Justos por pecadores

Esta frase es habitual escucharla en el seno educativo en el que me desenvuelvo. Es fácil que algún alumno la utilice para expresar su disconformidad con alguna medida que se toma de forma general sin concretar de manera individual sobre cada uno de los casos.

Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai

Esta frase es habitual escucharla en el seno educativo en el que me desenvuelvo. Es fácil que algún alumno la utilice para expresar su disconformidad con alguna medida que se toma de forma general sin concretar de manera individual sobre cada uno de los casos.

Y, sinceramente, tienen razón. Además, demasiadas veces comprobamos en nuestro día a día que se cumple de forma casi irremediable. Hasta ahora, en las administraciones se viene justificando la concesión de ayudas económicas a las familias a pesar de saber que existe un porcentaje de ese dinero que no se utiliza para lo que en realidad se entrega.

Esto se hace, alegando que merece la pena si el dinero llega a quienes lo necesitan de verdad, es decir, que si de 10 familias, 7 no te engañan, pues el dinero de las otras tres se puede considerar una pérdida justificada.

Y digo yo, ¿no sería mejor controlar de alguna forma y, qué fueran las 7 familias necesitadas de verdad las que recibieran estas ayudas? Es evidente que los filtros que la administración utiliza no terminan de ser efectivos y, por tanto, en demasiadas ocasiones pagan justos por pecadores, cuando acusamos a aquellos que reciben algún tipo de ayuda de mal utilizarla (por cierto, estas ayudas en si lo que hacen o deben hacer es dotar a la ciudadanía de derechos fundamentales que nos hagan estar en igualdad real, y no como una obra de caridad).

Si hablamos de corrupción, de violencia, de tópicos, de trampas…Al final, nos daremos cuenta que todos caemos con demasiada frecuencia en esta expresión que estamos luchando por hacerla desaparecer del mundo de la educación y, créanme si les digo, que nuestros niveles de crispación disminuirían si intentáramos ver en lo concreto de cada caso y no en la siempre injusta generalidad que tanto nos llama la atención.

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN