San Fernando

Martes Santo en crecimiento y en el que por fin se ha derramado la cera

El recuerdo de Ignacio Bustamante Morejón impregnó la tarde cofrade, no sólo a la Hermandad del Huerto.

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El Martes Santo se vivió con sentimientos contrapuestos en el día de ayer. Por un lado la alegría de un día radiante, como hace tiempo que no tenía una mañana así, una tarde propicia, pero el recuerdo a quien durante años fue alma mater de la cofradía del Huerto, Ignacio Bustamante Morejón, que llevó luto en el paso de su Gracia y Esperanza Coronada. Sólo un lazo en un varal.

No fue el único, la cofradía de la Caridad también discurrió a los sones de la marcha La Oración en el Huerto por Carrera Oficial, en recuerdo a Ignacio. Nunca esta marcha había sonado tanto en la Semana Santa isleña y es que la aportación de Ignacio Bustamante Morejón al mundo cofrade de La Isla no se quedó sólo en el Huerto.

Fue un Martes Santo especial, donde se pudo ver el crecimiento patrimonial de cofradías como Prendimiento, con la talla completa del canasto y las coronillas de las tulipas, así como la trasera ya completa del paso de la Virgen de la Caridad, o los candelabros dorados del Señor del Huerto.

La cofradía del Prendimiento pasó por la Avenida de Reyes Católicos para coger en sentido contrario la calle Constructora Naval. Cuatro horas tarda la hermandad en llegar a Carrera Oficial. En la salida, fue el concejal Daniel Nieto quien abrió las puertas del templo, mientras que el que fuera hermano mayor de Humildad y Paciencia, José Rodríguez Valverde, dio la levantá al paso de palio de la Virgen del Buen Fin, dedicándole también unos versos.

La cofradía del Parque se vio arropada en su nuevo itinerario, especialmente en calles como General García de la Herrán y Constructora Naval. Las cuadrillas de cargadores de la hermandad, contaron con el acompañamiento de la agrupación Sagrada Resurrección y banda de San José Artesano, que se estrenaba en la Semana Santa de 2014 en La Isla, aunque no ha cesado en actuaciones desde el Viernes de Dolores.

La cofradía del Huerto salía con una plaza enmoquetada y discurrió con mayor ritmo que otros años. El paso de misterio, que estrenaba el dorado de los candelabros de las esquinas, estuvo acompañado por la agrupación de Nuestra Señora de la Estrella, de Dos Hermanas, que rindió a un gran nivel.

De la misma forma, la banda Fernando Guerrero, de Los Palacios, que acompañó el lunes a Afligidos, acompañó el paso de palio de la Virgen de Gracia y Esperanza Coronada, que ha lucido de forma esplendorosa en la calle Ancha con toda la cera encendida y a los sones de marchas como Mi Amargura o con Osanna in Excelsis, de moda este año.

La trilogía de hermandades se completó con la Caridad. La Virgen lució un corazón bordado en plata en su pecho, al igual que hiciera en sus cultos, siendo una novedad junto con el estreno de las capillas traseras, que vienen a completar el canasto trasero del paso. La banda Maestro Agripino ha acompañado el paso de la Caridad, portado por una cuadrilla de la JCC, al igual que los pasos del Huerto.

Los miembros de la junta, también llevaron pértigas rematadas con el nuevo escudo de la hermandad, realizadas por el orfebre isleño Miguel Cuadros. La Virgen de la Caridad pasó las Siete Revueltas y la calle Comedias rodeada de una multitud, al igual que el Huerto en la calle Ancha o el Prendimiento en el Parque.

Las tres cofradías mostraron la evolución y el trabajo de todo un año en la calle y en la jornada de este Martes Santo, pudieron recorrer sus itinerarios sin la sorpresa de la lluvia, permitiendo el regreso de Caridad al barrio de las Siete Revueltas y Comedias.

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