La lepera Laura García-Caro, que este viernes debutó en Pekín en un Mundial con un puesto 32 en marcha, cree que el campeonato le viene aún "un poquito grande", pero confía en que la experiencia le sirva para "hacerlo mejor en unos años".
García-Caro, de 20 años y que completó los 20 kilómetros en 1h36:22, confesó que su resultado no era el que esperaba, aunque también se declaró "contenta por haber finalizado en un Mundial".
"Era muy difícil, entre el calor, la humedad y el nivel. A mí esto aún me viene un poquito grande", señaló la marchadora.
"He estado un poco más atrás de lo que esperaba, pero se ha hecho una carrera muy dura, desde el principio. He intentado luchar desde el principio yendo de menos a más a ver si me iba recuperando, pero mis piernas hoy no han respondido", relató García-Caro.
La onubense se queda con su participación en Pekín con que le sirve "para coger experiencia y confianza de cara al año olímpico".
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