El proyecto All-gas, que tiene como objetivo principal la obtención del biogás a partir del cultivo del microalgas en aguas residuales (regeneradas), afronta la etapa de mayor calado desde que comenzara la experimentación en la EDAR de El Torno en 2011, conocida como etapa de demostración. Así, a principios del mes de junio se dio comienzo a la ejecución de unas fases de la obra demostrativa, englobadas dentro de los terrenos municipales anexos a la estación depuradora de aguas residuales, quedando pendiente el inicio de la segunda fase para el mes de agosto y que se ejecutará en una marisma próxima a la EDAR.
El responsable de investigación de la empresa Aqualia que abandera el Consorcio, Frank Rogalla, explica que “se trata de un momento crucial para el proyecto, puesto que ahora necesitamos comprobar si los resultados obtenidos en las fases piloto y prototipo son extrapolables a escala real”. “Podremos así comprobar si los procesos de cultivo y la obtención de productos de valor ecológico de las mismas siguen el mismo patrón que el experimentado en las fases anteriores, donde los resultados son bastante satisfactorios”, indica Rogalla, quien añade que “el proyecto All-gas es un ejemplo claro de economía circular, ya que se transforma de forma sostenible un residuo en materias primeras de alto-medio valor añadido, desarrollando así un proceso novedoso sostenible con el medio ambiente”.
La empresa chiclanera Canalizaciones Al-Andalus ejecuta las obras que desarrollan en dos fases. En una primera se acometen las actuaciones en terrenos anexos a la depuradora, donde se construyen las infraestructuras necesarias para el procesado de la biomasa cultivada en las lagunas, cosechado o separación de la biomasa algal del agua, digestión anaeróbea para producción del biogás, purificación del biogás y, finalmente, sistema de suministro de gas natural comprimido. Posteriormente en una marisma próxima se acondicionarán los “raceways” o balsas en las que se procederá al cultivo propiamente dicho.
Algunos de los elementos a destacar que se sumarán a las instalaciones del proyecto son un digestor de 2.750 metros cúbicos, donde se procesa el alga para producir el biogás, deshidratación, gasómetro, caldera de biomasa, antorcha, intercambiador de calor y tuberías de interconexión.
En este sentido, el delegado de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Chiclana, Joaquín Páez, señala que “alcanzar esta fase del proyecto es sumamente transcendente, porque supone para una ciudad como Chiclana situarla en un escalón más alto si cabe en una investigación tan importante como es la que persigue la obtención de una energía limpia y ecológica. Todo ello además usando el agua residual de la depuradora, que al final del proceso se convierte en un agua regenerada y reutilizable para el cultivo o el riego”.
Páez destaca que “las relaciones entre el Consorcio All-gas y este Ayuntamiento se ha caracterizado por la colaboración desde el mismo momento en el que el proyecto de investigación comenzó a andar. Como consecuencia de ello, hoy tenemos mejores instalaciones en la EDAR de El Torno y estamos convencidos de que All-gas todavía tiene mucho que aportar a esta ciudad”.
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