Por Manuel de Medio
Hace unos días fallecía en Madrid Julia, de 94 años. Esta soriana vivía junto con su hermana Encarna, de 83 años, en una residencia para mayores en la localidad castellanoleonesa de Matamala de Almazán. Julia decidió abandonar su casa de Madrid e irse a vivir con Encarna. Se supone que llevaban una vida más o menos plácida.
Pero esta tranquila y apacible existencia se vio bruscamente interrumpida cuando recibieron una notificación de la Junta de Castilla y León informándoles que las consideraban “la misma unidad familiar” y que por tanto una de ellas debía renunciar a su pensión no contributiva. Cada una cobraba 380 euros. Después de pensarlo y comprobar que no podían iniciar un proceso judicial contra la Administración, Julia decidió que lo mejor era volver a su casa de Madrid y vivir separadas. Murió la pasada semana.
Huérfanas de un padre que fue asesinado en la Guerra Civil, fueron represaliadas en la Dictadura y tampoco parece que la Democracia les haya tratado muy bien.
Un vecino de Matamala de Almazán inició una recogida de firmas “on-line” y tras recoger 135.000 firmas pretende que el Congreso de los Diputados modifique la normativa, ya que considera que se ha producido una interpretación restrictiva de la Ley de Pensiones.
En una pasada “carta a Nacho” hice referencia a la surrealista -con casos como éste, parece que no tanto- y genial película de Terry Gilliam, “Brazil”. En ella, la administración pública es descrita como un inmenso ovillo burocrático. Un aparato administrativo que aprendió a quitarse a los contribuyentes de encima atiborrándoles de impresos. Un sistema regido por modelos protocolarios que no contempla al individuo y sí a la masa.
Continúo siendo un iluso, un romántico y por principio sigo creyendo en las personas. Huyo de “las manos negras”. De un reducido y elitista grupo de presión que, en el más absoluto anonimato, sólo se dedique a pensar en cómo fastidiar al resto de mortales. Sin embargo, sí creo en la saturación de trabajo de nuestros funcionarios, en la excesiva carga de formularios, en un sistema administrativo que se limita a aplicar modelos que impiden el razonamiento, de ver y estudiar el caso específico. La situación personal.
Encarna se enteró en la residencia de ancianos de la muerte de su hermana Julia y en un comunicado la Junta de Castilla y León aclara que la Administración regional sólo se limita a aplicar la Ley General de la Seguridad Social. Y en “Brazil” se escucha una y otra vez el tema de Ary Barroso, “Aquarela do Brasil”.
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