La sociedad esta hoy día más informada sobre enfermedades de transmisión sexual como el SIDA.
No obstante, en los últimos años se está percibiendo una cierta “relajación” en parte de la población joven con respecto a la toma de precauciones, lo que está llevando a un ligero alza en el número de casos registrados en la provincia, según han trasladado a este periódico varias asociaciones gaditanas que trabajan en labores de prevención y en la ayuda a las personas infectadas.
Así, desde el Hogar Siolé, la asociación jerezana de ayuda a afectados de VIH/Sida, su presidenta, Rosalía Bejarano explica que “no han aumentado los casos” a nivel general sino que “hay un repunte en un perfil de persona joven”.
La asociación lleva a cabo programas de detección precoz del VIH, entre otras enfermedades de transmisión sexual, de forma gratuita y confidencial.
De este trabajo extraen conclusiones como las de que el descubrimiento de la enfermedad incide “generalmente en relaciones hombre con hombre, con un nivel de estudios medio”. “Desafortunadamente, en algunas de las prueban dan positivo”, comenta Bejarano.
La presidenta de Siloé menciona que hay más infecciones en hombres que mujeres. “También puede darse en relaciones de pareja heterosexual”, matiza. Paralelamente, explicó que el contagio por jeringuilla no existe en la zona.
Concienciación
Además de estos tests, el Hogar Siolé lleva a cabo campañas de prevención y educación sexual en institutos de la zona.
“La información que hay es buena, llega, pero creo que partimos de un error, el cual ya se tiene que eliminar, que es esa idea de que ‘a mí eso no me va a pasar, del ‘yo no soy’ del mal llamado ‘grupo de homosexuales’, de ‘homofílicos’, de ‘heroinómanos’”, dice.
“Al no identificarse con esos ‘grupos’, los jóvenes desoyen la información que llega”, expone.
Es en este contexto donde señala que algunos de ellos “bajan la guardia” y no identifican posibles “consecuencias” de una relación.
Gerasa
Similar análisis se hace desde el Hogar Gerasa, una casa de acogida para enfermos de SIDA de la Bahía de Cádiz situada en Chiclana. Su objetivo principal es asistir a las personas infectadas que carezcan de apoyo social y familiar.
Además de cuidados sanitarios, Geresa trabaja en la reintegración social de los acogidos.
Amalia, psicóloga en el Hogar Gerasa, afirma que “efectivamente durante los últimos años hay una mayor incidencia entre los más jóvenes”.
“La principal vía de infección es la sexual, en hombres que tienen sexo con hombres”, añade
En este sentido, recalcó el problema de los casos de VIH sin diagnosticar, debido a que “aún existen muchos prejuicios a la hora de realizar las pruebas de detección”.
También hizo referencia a la “actitud de relajación entre los más jóvenes”, lo cual “puede deberse a una disminución en la percepcion de riesgo de contagio, con lo cual las practicas de riesgo sexual aumentan”, según manifestó la especialista.
Menos estigmas, pero sin una normalización
A través de las pruebas realizadas por el Hogar Siloé se han descubierto unos 15 casos en los últimos tres años. “No debería haber ninguno”, lamenta la representante del Hogar Siloé Rosalía Bejarano. La estigmatización de la enfermedad hace que, incluso a la hora de hacerse el test, haya personas que opten por otras localidades distintas de la de residencia.
Por eso, Rosalía Bejarano, de dicha ONG, explica que las detecciones mencionadas es una muestra de personas de Jerez y otros lugares. Desde la ONG señalan que de las primeras cosas que se dice al afectado es que se acuerde de las personas con las que haya tenido relaciones y se lo diga, “porque pueden estar infectadas”. “Es una situación dura, aunque luego estén los tratamientos y sea una enfermedad crónica”, manifiesta. ¿Está la enfermedad tan estigmatizada como antes? Bejarano explica que “no esta tan estigmada físicamente”, pero que “tampoco está normalizada”. “Por ejemplo, no se puede decir ‘soy seropositivo’ al mismo nivel que se dice ‘me han diagnosticado una diabetes’, porque conlleva dar explicaciones”.
“Se tienen que decir cosas que son muy de lo íntimo, que es muy difícil que te entienda a quien se lo tienes que explicar”, comenta. Para normalizar la situación, el Hogar Siloé propone que en las analíticas habituales realizadas por los médicos se incluya también la prueba del SIDA, “como se hace en otros países”. “De esta manera, se ve como algo normal, y se diagnostica en una fase muy inicial”, dice.
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