Alrededor de medio centenar de personas ha secundado este miércoles la manifestación convocada por el sindicato CGT y otras plataformas sociales para mostrar su rechazo a la situación sanitaria del Campo de Gibraltar.
El PA, que se ha sumado a la protesta, ha mostrado su disconformidad con los "recortes" que la Junta está aplicando en materia sanitaria "en toda Andalucía, y especialmente en el Campo de Gibraltar".
En declaraciones a los periodistas, el secretario comarcal del PA y alcalde de Los Barrios (Cádiz), Jorge Romero, ha indicado, a las puertas de la Subdelegación del Gobierno de la Junta en Algeciras, que "el PA siempre ha estado del mismo lado de la pancarta", refiriendo que las posiciones de IU y PSOE que "varían dependiendo de si están o no en el gobierno".
Romero ha lamentado que los ciudadanos de la Bahía de Algeciras tengan "una sanidad de tercera o cuarta categoría", subrayando que "hay recortes en el número de camas", además de recordar el reciente episodio vivido en el hospital del SAS en La Línea "en el que han aparecido ratas en los quirófanos".
El andalucista ha lamentado que la Junta "no tome cartas en el asunto en uno de los pilares básicos para la ciudadanía como es el de la sanidad".
Una de las reivindicaciones de los manifestantes, tanto de los sindicatos como de los políticos, es la necesidad "urgente" de que la Junta reanude las obras del nuevo hospital de La Línea de la Concepción. Trabajos que "están paralizados desde hace ya más de dos años.
Por su parte, el secretario provincial del PA, José María España, ha pedido "la dimisión de la delegada territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales y de la consejera". En este sentido, recuerda que el Gobierno andaluz "dijo que había líneas rojas que no se podían traspasar, y una de ellas era la sanidad". Sin embargo, "en Algeciras han cerrado la unidad de paliativos, cierran camas durante el verano y hay muchos problemas".
Desde CGT, David Sanz ha explicado a Europa Press que la manifestación, que partió desde el Hospital Punta de Europa y acabó en la sede del Gobierno andaluz en Algeciras, "es una llamada de atención sobre lo que está ocurriendo". Así, en un acto simbólico, el sindicato ha sorteado una cama de hospital entre los asistentes para mostrar "lo que puede pasar si esto no se para".
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