Este año desde el anochecer del martes 30 de mayo y hasta el anochecer de hoy 1 de junio se celebra la fiesta judía de Shavuot. La palabra “Shavuot” significa “semanas”, y coincide con la séptima semana después de Pésaj, la Pascua Judía. En el calendario hebreo coincide con los días 6 y 7 del mes de Siván. En un principio era una fiesta eminentemente agrícola, de agradecimiento por los frutos recibidos.
Se transformaría en una fecha en la que se recuerda la entrega de la Torá o Ley Judía al profeta Moisés en el Sinaí. Es costumbre tomar productos lácteos en estas fechas, pues es tradición que después de recibir la Torá no tuvieron tiempo suficiente para preparar carne para comer. Otros dicen que la Torá es dulce y se asemeja a la leche con miel. Una de las expresiones más hermosas del pueblo sefardí la encierra la frase en judeoespañol en la que se desea al prójimo: “kaminos de leche i miel”.
Desde el próximo sábado al anochecer los católicos celebramos Pentecostés. Esta festividad coincide, como su nombre indica, con el quincuagésimo día desde la Pascua de Resurrección, final de la Semana Santa. No es casualidad la coincidencia y proximidad de ambas festividades. Cuando los apóstoles recibieron el Espíritu Santo fue justamente en la fiesta de Shavuot (Pentecostés).
Un año más se pone de manifiesto la proximidad, en sus orígenes, de ambas confesiones religiosas. Moisés recibió la Torá para transmitirla al pueblo hebreo y éste al mundo, y los apóstoles recibieron al Espíritu Santo para servir al mundo y a su Creador.
En palabras de mi amigo Mario Eduardo Cohen: “En el Sinaí se generaron las normas universales de convivencia humana, las ideas del monoteísmo ético, de igualdad de los seres humanos ante el Creador, respeto por el extranjero, la viuda y el huérfano, del derecho al descanso semanal, el cuidado de la naturaleza y la obligación de solidaridad con los semejantes. También el tan repetido y desgraciadamente olvidado: “no matarás”, etc. “, creencias que, como bien manifiesta, hoy representan los ideales de la fe religiosa de las tres grandes religiones monoteístas y que, lamentablemente, están todavía lejos de ser alcanzados por gran parte de la humanidadad..
Shavuot y Pentecostés, nunca está de más recordar que en muchas ocasiones entre las aparentes grandes diferencias, existen conexiones que se nos siguen planteando como fundamentales en la consecución de un mundo más equitativo y unitario.
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