Hace algunas semanas, una mujer de 52 años que respondía al nombre de Matilde y afirmaba haber sido votante de Podemos en las últimas elecciones se manifestaba en el Pleno municipal desesperada porque no tenía dinero con el que pagar el alquiler de su vivienda. Desde entonces asegura que “lo único que he recibido por parte de la edil de Vivienda, Eva Tubío, es rechazo”. En concreto, a través de su facebook pide la dimisión de esta concejala porque “no hace ni el huevo”, a la vez que habla de haberse vengado de ella por lo dicho en el Pleno.
De ahí que ayer mismo entregara un escrito pidiendo ser recibida por el alcalde de Cádiz, José María González, después de recibir la respuesta del Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, donde el 9 de mayo le indicaban que tras haber hecho las gestiones oportunas por su escrito de queja del 29 de marzo, se pusieron en contacto con la delegación de Asuntos Sociales para que “nos informara de los hechos que usted nos comentó y que dieron lugar a la queja. Sin embargo, hasta la fecha no hemos obtenido respuesta de tal organismo”. Por ello, la Oficina del Defensor del Pueblo Andaluz ha reiterado el requerimiento de la información a dichas dependencias municipales.
Intervención en el Pleno
Esta mujer afirmó entonces que llevaba dos años sufriendo los recortes del Ayuntamiento en relación con las ayudas al pago del alquiler, a pesar de que no dejó nunca de pagar su parte. En esta misma intervención acusó a la concejala de Vivienda, Eva Tubío, “que fue mi trabajadora social” de “mentir” y le exigía “humildad ante todo”. Esta mujer tiene muchos problemas de salud, que se le agravan por momentos.
Al Defensor del Pueblo Andaluz le contaba que llevaba “20 años esperando una vivienda, que desde hace dos años me han recortado la ayuda a la vivienda, que han recortado también en las ayudas a los alimentos y que no veo mucho interés por ayudar a quienes menos tenemos”.
Esta mujer debe pagar no sólo el alquiler, sino también el agua y la contribución. Ya ha sufrido algún corte de agua en los últimos meses, pero al final ha podido subsanar la situación.
Según su testimonio, recibe ayudas para el pago de la luz y ahora está pendiente de que se seleccione a los alumnos para el curso de ayuda a domicilio en el que se ha apuntado.
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