La Comisión Europea (CE) consideró hoy "justificados" los controles de capital anunciados ayer por el Gobierno de Grecia y subrayó que ahora mantener la estabilidad financiera ha de ser "el principal e inmediato" reto de Atenas.
La CE "ha hecho una evaluación inmediata y preliminar de las medidas griegas que introducen controles y las considera a primera vista justificadas", señaló el comisario europeo de Asuntos Financieros, Jonathan Hill.
El Ejecutivo comunitario considera, no obstante, que aunque las medidas restrictivas parecen "necesarias y proporcionadas en este momento", la libre circulación de capitales deberá ser reintroducida "tan pronto como sea posible" en interés de la economía griega, la zona euro y el mercado único de la UE.
La CE seguirá la situación de cerca, así como la aplicación de las medidas restrictivas, y está preparada para asistir a las autoridades griegas con los aspectos técnicos, añade Hill.
El comisario recuerda, por otro lado, que de acuerdo con el tratado de funcionamiento de la UE, los Estados miembros pueden tomar medidas acerca de los movimientos de capital cuando están justificadas por razones de orden público o seguridad pública.
De acuerdo con la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la UE, las medidas también pueden ser introducidos por otras razones de interés público.
"Tales excepciones al principio de libre circulación de capitales deben interpretarse de forma muy estricta, y deben ser no discriminatorias, así como adecuadas y proporcionadas a la luz del objetivo. Esto también significa que los controles de capital deben aplicarse durante el menor tiempo posible", continúa.
"En las circunstancias actuales, la estabilidad del sistema financiero y bancario en Grecia constituye un asunto de primordial interés público y las políticas públicas que aparecerían para justificar la imposición de restricciones temporales a los flujos de capital", añade.
Grecia impone a partir de hoy los controles de capital tras la decisión del Banco Central Europeo de no elevar los préstamos de emergencia a los bancos, hecho que llevó al primer ministro, Alexis Tsipras, a urgir nuevamente a sus socios a prorrogar el rescate.
A través de un decreto oficial, publicado tras una reunión maratoniana del consejo de ministros, el Gobierno griego informó de que los bancos permanecerán cerrados durante seis días y el límite de retirada de efectivo es de sesenta euros diarios.
Las entidades bancarias cerrarán hasta el 6 de julio, aunque este periodo podría acortarse o extenderse por decisión del ministerio de Finanzas, al igual que el límite de retirada de dinero.
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