El Deutsche Bank, el banco más grande de Alemania, se desprenderá de buena parte de su participación en el Postbank, que actualmente alcanza el 94,1 % y que deberá reducirse a menos del 50 %.
La decisión se tomó en una sesión maratoniana del consejo directivo que terminó esta madrugada y los detalles no serán dados a conocer hasta el lunes.
Según un portavoz del banco, es posible incluso una venta total del Postbank.
El Deutsche Bank también realizará recortes en sus negocios de inversiones, mientras que la idea de desprenderse por completo del negocio de banca privada ha sido de momento descartada.
Con la nueva estrategia el Deutsche Bank reacciona a nuevas normativas sobre los niveles de capital propio y a la presión de los bajos intereses.
El Deutsche Bank, en medio de la crisis financiera de 2008, era el mayor accionista del Postbank con una participación del 30 % y dos años después se aseguró la mayoría en ese banco, especializado en clientes privados.
La idea era que el Deutsche Bank redujera su dependencia de los negocios de la banca de inversiones.
La transacción costó cerca de 6.000 millones de euros y las expectativas nunca se cumplieron.
El objetivo era aumentar los beneficios del Postbank, que tiene 14 millones de clientes, a 3.000 millones de euros.
El año pasado los beneficios fueron de 1.300 millones de euros.
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