El cofrade Óscar Roldán Soto ofreció el pasado domingo la vigésimo tercera edición de la Exaltación al Lunes Santo; un pregón que dejará una huella especial en esta serie al dedicar, por primera vez, gran tiempo de su disertación al enaltecimiento no de la hermandad de las Tres Caídas como hasta ahora, sino de todas las hermandades que conviven en la parroquia de San Francisco.
Pero, además, Óscar Roldán repararía en el terreno personal en la grave enfermedad de su hermano como testimonio doloroso en el seno de su familia y como experiencia vital que en cierto modo le condujo más aún a la figura de Cristo.
El exaltador del Lunes Santo imprimió a su pregón un carácter reivindicativo y muy actual al tocar un tema tan susceptible como la inmigración, para exigir de los cristianos un mayor esfuerzo, si cabe, por comprender y reparar en este auténtico drama del mundo.
En suma, Óscar Roldán pronunció una exaltación de pies en la tierra y con un profundo y meditado mensaje cristiano.
El exaltador contó con su amigo Iván Lozano Soto como presentador encargado de reeditar su biografía y sus vínculos cofrades con las hermandades de su Iglesia.
Su pregón fue muy agradecido, por ejemplo, por la junta de Gobierno de la hermandad caidista representada en su hermana mayor, David Arias, que consideró muy acertado que por primera vez en la historia de este acto se hiciera mención de las distintas hermandades del templo.
Contó, además, con la asistencia de la presidenta del Consejo Local de Hermandades y Cofradías, Mari Nieves Sánchez, y de un nutrido grupo de cofrades arcenses, fundamentalmente ligados a la hermandad de Nuestro Padre Jesús de las Tres Caídas y María Santísima de la Amargura, así como del presidente del Consejo Pastoral de la Parroquia de San Francisco, Antonio Arias.
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