Hay personas que han esperado paciente, y pensamos que inteligentemente, a formar parte de un proyecto político. La experiencia que se adquiere con los años y el sentido de la perspectiva que aporta la edad se nos antojan fundamentales para llegar a la actividad política con el sosiego y responsabilidad que ello merece. Tal vez este sea el caso de Juana Cordero Domínguez, una mujer nacida en Algodonales hace 48 años pero que reside en Arcos. Estamos ante la número tres de la candidatura con la que Ganemos Arcos concurre a las elecciones municipales.
¿Cómo descubre Ganemos Arcos? ¿Qué tenía este movimiento ciudadano que le hizo interesarse por la vida política?
—Lo descubro a través de una de las personas que pertenecen al grupo promotor de esta idea: Susana Pérez. Ya la conocía de un proyecto transnacional del Instituto de Empleo y Desarrollo Socioeconómico y Tecnológico de la Provincia de Cádiz (Cádiz-Marruecos) en colaboración con la Mancomunidad. En un café me explicó la idea, el grupo de promotores, la figura que se pensaba crear..., y a mí, que estaba en un momento de búsqueda y cambio en mi vida, en el que pensaba que todos los políticos se portan de forma muy parecida y que están perdiendo la voz de pueblo, me encantó. Me emocionaron las ganas de trabajar, la organización de algo meditado durante años, la ilusión por cambiar las cosas en nuestro pueblo y me ofreció ir a una asamblea para compartir ideas, sueños, trabajos y un proyecto común: el empoderamiento de la ciudadanía arcense. Por fin escuché hablar de la forma de hacer política que yo siempre había entendido. Pasé sin quererlo de pensar en política, a participar activamente.
¿Cree que la sociedad sabrá valorar el proceso de primarias que ha celebrado Ganemos Arcos?
—Nosotros estamos muy agradecidos y satisfechos de la gran participación que hemos tenido para elegir candidatura en primarias ya que, comparado por ejemplo con ciudades mucho más potentes como El Puerto de Santa María, hemos tenido prácticamente la misma participación en votos, tanto en esta votación como en el apoyo para conseguir los avales que necesitamos para constituirnos legalmente como agrupación de electores. La alta participación es siempre buena aceptación por ello creemos que si se está participando es porque están valorando que por primera vez se le de voz a la gente del pueblo, para que pueda elegir candidatura, para su posterior participación en la acción de gobierno. Aun así, hay mucho trabajo que realizar, tanto formativo como de transparencia, para que la ciudadanía confíe en que esto es una realidad y no una promesa más, y formación educativa para perder el miedo a la participación.
Ganemos Arcos habla de su deseo y de la necesidad de “transformar la sociedad”. ¿Qué aspectos cambiaría usted de las administraciones, del trabajo político e institucional?
—Las administraciones tienen que trabajar al servicio del ciudadano de una forma real, absoluta y transparente. La transparencia, tan demandada hoy en día, aún es una cuenta pendiente. Por lo tanto, lo primero sería crear herramientas a través de las cuales los ciudadanos vigilen, conozcan y tengan información continua de la acción de gobierno, de sus representantes. Qué ingresos tenemos y qué partidas de gastos de forma pormenorizada, no en totales, no interpretables por los ciudadanos. Voz en los plenos y comisiones. Figuras de defensa de los ciudadanos. Acción directa. Por tanto, de la ciudadanía mediante discusión en asambleas. Se está trabajando ( aunque aún tiene que ser refrendado en la asamblea de ciudadanos) en fiscalizar los procedimientos, normativas y grados de cumplimiento en las contrataciones públicas tanto de medios materiales, infraestructura y medios humanos. Pero queremos inclusión en esta fiscalización de todas las formaciones con representación de gobierno, análisis de endeudamiento. Los plenos no son para ejecutar estrategias, sino para informar, debatir y decidir mediante el consenso de todos los representantes de los ciudadanos y con los ciudadanos. En cuanto al trabajo institucional, va dirigido, últimamente a la difusión del partido político y a la consecución del rédito político antes que al trabajo de colaboración y el establecimiento de redes institucionales por las que se consigan proyectos de generación de empleo y riqueza para los arcenses.
Usted tiene gran experiencia laboral en asuntos económicos y conoce en este sentido a fondo el funcionamiento de una institución como la Mancomunidad en la que ha trabajado...
—Diría que tiene en común con el Ayuntamiento la perspectiva del trabajo a corto plazo. El día a día les puede. No se suele tener en cuenta los proyectos a largo plazo o de desarrollo local que terminen de forma positiva. La duplicidad en el gasto, la falta de estrategia, el despilfarro, la no planificación y el no escuchar a los técnicos de cada entidad hace que se pierdan recursos continuamente, cuando a la vez se tienen que pedir préstamos para tapar la mala gestión y el doble gasto ocasionado. El clientelismo hace que se dupliquen los puestos de trabajo y queden en el olvido técnicos que parecen no afines. La ciudadanía percibe que todo este movimiento y acciones espontáneas se ciñen a compromisos políticos e intereses electorales. Nosotros no estamos aquí para aportar ideas y planes de eficiencia y para ayudar a la utilización de los recursos olvidados o no utilizados. Para la planificación y colaboración con todos aquellos que aporten ideas útiles, vengan de donde vengan. También está en la mente de todos los procedimientos judicializados que nos dan a pensar que las acciones de gobierno no han sido todo lo adecuadas que debería, sin entrar en las causas que han provocado estas intervenciones judiciales, ya que no tenemos enemigos políticos. Venimos a tender una mano y a trabajar.
¿Piensa usted que es preciso dar prioridad al pago de la deuda pública que a los servicios que requiere el ciudadano o que puede y deber un equilibrio en ambos objetivos?
—Nada debe estar por encima de los servicios que requiere el ciudadano, y que cualquier partido político o agrupación electoral debe priorizar. La deuda pública excesiva es la consecuencia de una mala gestión de los recursos públicos, que son en definitiva las aportaciones de la ciudadanía mediante impuestos, y tasas, pero el pago de ella y el equilibrio entre el pago y la renegociación si es posible de ésta se hace necesario, para que no influya nunca en los servicios que deben prestarse a la ciudadanía; ahora sí, habría que poner en marcha un plan de gestión y revisión de la deuda, que trabaje sobre medidas para reducción de esta deuda mediante el aprovechamiento de recursos humanos y materiales infrautilizados, conjuntamente, como he referido antes, en el control efectivo del gasto frente a gastos innecesarios y suntuarios que sólo sirven para el protocolo y rédito político.
Precisamente en la Mancomunidad se ha apostado por una política de servicios públicos gestionados por empresas públicas. Si Ganamos Arcos gana las elecciones, ¿volvería a rescatar las empresas que gestionan el servicio de aguas y la recogida de basuras?
—Desde Ganemos Arcos se defiende los servicios públicos de calidad frente a las privatizaciones, para de esta forma garantizar el servicio y las instalaciones e infraestructuras necesarias, para suministrar estos servicios. Pero en el caso concreto de este Ayuntamiento, existen contrataciones ya realizadas, en las que no sabemos las prescripciones contractuales exactas, ni si puede haber decisiones en breve. Además siempre habrá que hacer estudios de las distintas opciones desde el punto de vista de la rentabilidad económica y la garantía de la prestación de estos servicios, junto con sus gastos accesorios por mantenimiento de las infraestructuras, pero lo que sí tenemos claro es que la ciudadanía de Arcos no entiende, ni nosotros, la privatización de un servicio publico básico como el agua. El objetivo es la remunicipalización.
Se viene cuestionando mucho el papel de Arcos en la Sierra como cabecera de comarca y población mayor. ¿Cree usted que la ciudad participa de las políticas comunes de la comarca y que tiene presencia en los programas que se aplican desde la institución?
—Arcos debe ser un pueblo dinámico, emprendedor y que sea cabecera de comarca, pero las políticas municipales de las corporaciones anteriores no creo que hayan favorecido el liderazgo comarcal de Arcos, sino más bien las políticas creadas han sido desarrolladas de espalda a la comarca. Creo que esto debería cambiarse y fomentar espacios comunes de debate y desarrollo de planes de turismo, industria, comercio, etc. Indudablemente, notamos el sectarismo político y esa es un arma con la que infunden miedo hacia las nuevas formaciones, partidos e iniciativas como la nuestra. Es una injusticia. Arcos no debe nunca incluirse en rencillas políticas, sino en establecer lazos institucionales que nos ayuden a que el proyecto político sea siempre inclusivo, amable y dialogante, para que por fin podamos de forma conjunta y con el trabajo de todas las formaciones y representaciones políticas bajar las cifras del paro.
En su caso, tengo entendido, participa por primera vez en una campaña electoral como candidata. ¿Qué expectativas maneja la agrupación y usted personalmente?
—Nosotros nos vemos como una opción real y viva. Nos gustaría que los arcenses nos diesen su confianza para ganar, pero dado el gran número de participantes que opta a conseguir la Alcaldía, y sin ser prepotente, nos gustaría al menos tener presencia en el Pleno, y comenzar trabajando por nuestro pueblo mediante la aportación de proyectos, ideas y planes de desarrollo. La colaboración y el positivismo serán nuestra bandera. Aquí nos tienen para cuando nos necesiten, para eso estaremos siempre dispuestos.
¿Qué opina de la política de pactos? ¿Apoyaría Ganemos Arcos otra candidatura? De ser así , ¿bajo qué condiciones?
—Los pactos con Ganemos son difíciles en principio, dado que nuestra forma de organizarnos y nuestras líneas rojas en un gobierno municipal pasan por más y mejor democracia, por rendir cuentas periódicamente a la ciudadanía y por la aceptación de un código ético, por la construcción desde abajo hacia arriba con horizontalidad. Si alguna formación decidiera secundar nuestras propuestas y demandas y aceptar nuestro código ético, habría una amplia consulta a la ciudadanía sobre la idoneidad o no de estos pactos o alianzas. Luego se actuarán en consecuencia a esta consulta.
Háblenos de su experiencia dentro de Ganemos Arcos, de lo que piensa de su cabeza de lista, del equipo humano, de sus nuevos compañeros…
—Mi experiencia en ganemos arcos comienza en diciembre, acudiendo a la segunda asamblea ciudadana e incluyéndome en el equipo jurídico-legal. Más tarde formé parte de equipo de administración y gastos, y fui nombrada coportavoz de este equipo. A partir de ahí, hemos estado trabajando por conseguir la constitución de la agrupación de electores, cumpliendo con una legislación farragosa y difícil. He participado en talleres sobre ideas que ayuden a nuestro pueblo y tenemos pendientes otros talleres sobre comercio y apuestas para el desarrollo de esta actividad empresarial. De mi compañera Susana, cabeza de lista, admiro su ilusión, su entrega, su organización y seguridad en que luchamos por un Arcos mejor; su preparación sobre conocimientos de política, por algo es de Ciencias Políticas, y su convicción sobre el proyecto de la participación ciudadana directa en las acciones de gobierno. Es segura, firme, serena, y clara. El grupo que formamos Ganemos Arcos tiene fortalezas diferentes y nos complementamos. Somos politólogos, informáticos, amas de casa, albañiles, desempleados, estudiantes, ingenieros, de la rama del derecho, profesores de francés y conocedores de la sostenibilidad y el medio ambiente, empresarios, economistas, empleados públicos, jubilados, etc. y, por tanto, diversos trabajadores todos y multidisciplinares, y en definitiva una ciudad en un grupo, tal y como es la ciudadanía de Arcos.
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