Las lentillas tienen una serie de beneficios por encima del uso de las gafas graduadas. Gracias a que cada vez más personas se han dado cuenta de la comodidad de usar lentes de contacto, el marcado se ha esforzado por incluir diferentes opciones.
Cómo escoger unas buenas lentillas
Lo primero de todo antes de elegir lentes de contacto es conocer tu problema, así como tu graduación. En las cajas de lentillas podrás ver una serie de siglas y números que, tal vez, te confundan. Si desconoces tu graduación acude a tu óptico de confianza para salir de dudas.
Los pasos para saber qué lentillas se adaptarán mejor a tus necesidades son:
1. Lentillas o rígidas: actualmente, la mayoría de las lentes de contacto son blandas o semirígidas. Esto es debido a que son mucho más respetuosas con la salud de los ojos. Las más recomendables son las lentillas de hidrogel de silicona por su comodidad, pero sobre todo porque dejan respirar los ojos adecuadamente.
2. Lentillas desechables o reutilizables: las lentes de contacto más saludables son las desechables, es decir, aquellas que se tienen que cambiar todos los días. A parte, son mucho más prácticas, ya que el usuario no tiene que preocuparse por su cuidado. Cada día estrena lentillas nuevas. Las lentillas reutilizables son ideales para aquellas personas que tienen que llevarlas todos los días o desean alternarlas con sus gafas graduadas.
Para no equivocarse con una elección tan importante es fundamental confiar siempre en los productos de profesionales, este es el caso de las lentillas online en Óptima Óptima. Un grupo de expertos ópticos que trabajan para ofrecer a sus clientes los mejores servicios.
La vista es, tal vez, nuestro sentido más importante. Por este motivo, hay que cuidarlo de la forma adecuada y siempre en consonancia con el problema visual que se tenga.
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