El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha asegurado este jueves "que harían falta diez transiciones, sin sus correspondientes 23-F, para poder intentar tener un poco de esperanza en una regeneración" del Estado.
En una entrevista de Rac 105, recogida por Europa Press, ha considerado "indecente" y un abuso que el Tribunal de Cuentas haya decidido activar el nombramiento de un instructor para que practique diligencias y proceda a la apertura de una investigación para dilucidar responsabilidades por la consulta soberanista del 9 de noviembre de 2014.
Puigdemont ha opinado que "es terriblemente injusto, es un abuso y una señal de cuál es la calidad democrática del Estado español que los cuatro del 9N --Artur Mas, Joana Ortega, Irene Rigau y Francesc Homs-- hayan de ser perseguidos por sus ideas y su compromiso democrático y haya quien les quiera perjudicar en su vida personal".
"Si ante la grave arbitrariedad y los abusos todavía hay quien piensa que es mejor estar en un Estado que trata así a su gente que no hacer otro desde bases democráticas evidentemente que hay un problema", ha indicado.
Ha afirmado que "lo único que puede impedir el referéndum es que no vayan los catalanes a votar" y ha reiterado que el 1-O habrá urnas, y sobre los Mossos d'Esquadra, ha asegurado que son servidores públicos y han de garantizar la seguridad de la gente.
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