La Guardia Civil ha confirmado a VIVA este viernes que continúa abierta la investigación para esclarecer la desaparición de Llisa Brown, escocesa de 34 años residente en Guadiaro que fue vista por última vez el 4 de noviembre.
Aunque en total se produjeron cuatro detenciones, el principal sospechoso es Simon Corner, que era su pareja sentimental. Fue detenido en Dinamarca y extraditado, El juzgado de San Roque decretó en mayo pasado su ingreso en prisión provisional -comunicada y sin fianza - por un presunto delito de homicidio.
Ahora fuentes de la Guardia Civil han indicado a VIVA que se van a retomar las labores de búsqueda del cuerpo de la mujer, tanto en tierra como en el mar, para lo que se usarán radares y equipos electrónicos bajo el agua. No hay que olvidar que la Benemérita estuvo recogiendo huellas en un barco velero que desde principios de año estaba amarrado en el puerto deportivo Marina Lanzarote, en Arrecife (Canarias).
Las mismas fuentes han confirmado que los investigadores hallaron ADN en restos de sangre que localizaron en la vivienda de Lisa Brown, por lo que se ha concluido que existió un episodio violento en el domicilio de Guadiaro. También en el coche de Lisa, que estaba aparcado frente a la vivienda tras su desaparición, se hallaron restos esclarecedores.
En la investigación también son cruciales los teléfonos móviles que Simon Corner tiró en el puerto de Copenhague. Los agentes trabajan en la recuperación de la información tanto de los dispositivos como de las tarjetas SIM.
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