Un palestino resultó muerto anoche en un enfrentamiento con soldados israelíes en la ciudad de Tulkarem, en el noroeste de Cisjordania, confirmaron hoy a Efe fuentes médicas palestinas.
"Un joven de 22 años murió ayer cerca del puesto de control militar de Tulkarem", confirmó a Efe Abed Manasra, portavoz de la Media Luna Roja (equivalente local a la Cruz Roja) en Cisjordania.
Según esta fuente, sus servicios médicos han atendido desde ayer a 457 palestinos heridos en disturbios en Cisjordania y Jerusalén Este, de los que unos 155 han sufrido heridas de munición real o de balas de acero recubiertas de goma y el resto han tenido que ser atendidos por inhalación de gases lacrimógenos.
Una portavoz del Ejército israelí señaló a Efe que "anoche cientos de palestinos se amotinaron violentamente cerca del puesto de control militar de Tulkarem, tirando a los soldados piedras, cócteles molotov fuegos de artificio y neumáticos ardiendo".
"Estos les instaron a que parasen y, ante su negativa, usaron medios de dispersión de masas y dispararon contra tres personas que habían lanzado bombas incendiarias contra ellos, identificando haber hecho blanco", añadió.
También se produjeron disturbios, entre otros lugares, en la ciudad de Hebrón, donde hubo varios palestinos heridos, entre ellos uno que sufrió el impacto de un bote de gas lacrimógeno en la cara.
Se espera que los incidentes y enfrentamientos continúen hoy, tras un fin de semana de gran tensión que siguió al asesinato en la tarde del sábado de dos israelíes por un palestino en la Ciudad Vieja de Jerusalén, que fue murió a manos de las fuerzas israelíes.
En la madrugada posterior se produjo otro ataque con arma blanca a un adolescente israelí de 15 años, que resultó herido y las fuerzas de seguridad israelíes mataron a un palestino de 19 años al que Israel acusó de ser el atacante pero cuya familia y otras fuentes palestinas lo niegan.
El pasado jueves fueron asesinados dos colonos israelíes en el área de Nablus, en el norte de Cisjordania, cuando viajaban en su coche con sus cuatro hijos, de entre cuatro meses y nueve años, que resultaron ilesos, en un ataque presuntamente palestino.
Israel ha incrementado la seguridad en Cisjordania y Jerusalén Este y ha vetado durante dos días (que se iniciaron ayer) el acceso de palestinos a la Ciudad Vieja de Jerusalén, exceptuando los residentes, comerciantes y a quienes estudian o trabajan en los colegios de la ciudadela.
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