Terremoto, acelerada e inestable. Así podríamos calificar la actualidad albiazul a tenor de los últimos acontecimientos acaecidos en el club en relación a la Agencia Tributaria y el aplazamiento de IRPF o no. El Decano, uno de los diez equipos con menor deuda de los 122 del fútbol profesional, y nueve conjuntos más están en una situación agónica. Ante tanta conmoción creada en el aficionado albiazul y a fin de dar cuentas y de instaurar la tranquilidad, el máximo dirigente de la entidad, Pablo Comas, ha hablado ayer para clarificar la situación albiazul a fin de como se estaba poniendo de oscura y siniestra. Me pregunto: ¿Ha sido contraproducente esta política de comunicación del presidente?
Creo que no. Mejor enfrentarse a la verdad de cara que esquivarla y dejarnos llevar por la inercia y por el solucionar las cosas pero sin que se entere el aficionado, el cual se acabaría enterado por otros medios y más tarde. El club es de la afición y nosotros somos lo más importante y Comas parece que ha captado este mensaje. Tildando la situación de grave, ha afrontado los miedos de cara y siendo él mismo el que compareciese. Se le podrá achacar muchas cosas en el pasado en aspectos relacionado con fichajes, precios de entrada en Copa o cuestiones de marketing con las camisetas para los abonados pero, en esta ocasión, no se le puede echar nada en cara.
¿Solución a todo esto? La unión de todos los estamentos albiazules, pasando principalmente por Víctor Hugo Mesa hasta los políticos. Una de las posibles vías para suavizar la situación financiera del club, un club enfermo económicamente sería que Mesa y Comas pusiesen más dinero en la mesa, algo muy difícil en este momento debido a que tienen las cuentas embargadas, o buscan un agente externo de financiación.
Otra vía sería encontrar el apoyo político. Aunque han ayudado algunos políticos a la hora de ultimar la inscripción del club, hace falta un paso más. Si de verdad son aficionados onubenses la mayoría, que demuestren su compromiso y no utilicen al club como arma política. Si de verdad desean velar y ayudar por la salvación de un signo tan de Huelva como es el Recreativo, es hora de la unión política de la capital sin distinción de colores e ideologías y hacer presión para que se produzca ese milagro que sería el aplazamiento del IRPF o se movilicen para buscar inversores junto con la directiva. Hacer algo ante la situación. y mientras, la polvareda ha aparecido y parece que se ha instalado.
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