La llegada de lanchas cargadas de fardos de hachís al Campo de Gibraltar es una imagen que se ve tan a menudo que hasta lo niños dibujan esas escenas.
Así se desprende de la pintada realizada en un muro en la zona de Tonelero, en La Línea de la Concepción. Un dibujo que viene a demostrar que los más pequeños han vivido la llegada de narcos en más de una ocasión, a juzgar por los detalles que han representado. No falta detalle. Han escrito hasta la potencia de los dos motores de la neumática. Y no pueden faltar los hombres que van descargando los fardos y se los pasan a aquellos que esperan en tierra, que los meten en un vehículo todoterreno. Un dibujo de lo más infantil pero que se corresponde con la cruda realidad.
"Ni las estadísticas de alijos aprehendidos, ni las noticias de prensa que no paran de hablar del narcotráfico en la zona, ni los ajustes de cuentas entre ellos, que no se denuncian,. ni siquiera la corrupción policial y política que genera el crimen organizado son tan tristes y tan indignantes como el efecto que causa esta lacra en los niños... llegan a verlo como algo normal", señalaba a VIVA un agente tras ver el dibujo.
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