Nueva acción de protesta de la Asociación de Profesionales Afectados de los Hospitales de Loja y Alcalá, Apahla. Un grupo de miembros de dicho colectivo se ha encerrado en la mañana de este miércoles en el Ayuntamiento alcalaíno, tras ofrecer una rueda de prensa a los medios de comunicación, con el propósito de permanecer 24 horas en el consistorio municipal, hasta las 10 horas de mañana jueves. A la finalización de dicho encierro, en la mañana del jueves, desde Apahla se ha agradecido "la predisposición desde el Ayuntamiento de Alcalá la Real para que este encierro nos haya sido lo más cómodo posible, habilitándonos una sala para poder pasar la noche".
El portavoz de Apahla en Alcalá la Real, José Carlos Jiménez, quiso poner en antecedentes sobre las gestiones realizadas por el colectivo desde su creación, a principios de 2014, recordando que en el mes de abril del pasado año eran recibidos por la Celia Gómez, directora general de Profesionales del Servicio Andaluz de Salud, quien concluyó que este grupo de profesionales “se encontraba en un limbo legal y que no podían trabajar en el SAS, porque no nos presentamos a oposiciones del SAS”. Posteriormente, el 23 de mayo se producía una nueva reunión en Loja con la consejera de Salud, tras la cual, el mensaje transmitido fue que “nuestras plazas dependían de la capacidad de presupuesto, y que debíamos esperar a que hubiera dinero”.
Tras el verano, el 29 de septiembre se presentaba en los juzgados de Granada una demanda contra la Junta de Andalucía “para reclamar nuestras plazas, vía judicial, que era lo que nos quedaba, proceso que sigue adelante, a pesar de las demoras que está sufriendo”. “El 3 de octubre era el gran día esperado, ya que se nos cita en la Delegación de Salud de Granada, con la presencia de Celia Gómez y representantes de la empresa Alto Guadalquivir. En esta reunión se nos dijo de que, antes del 30 de noviembre, se nos informaría sobre cuál sería la solución que se iba a dar a nuestro problema. Hoy, a 15 de noviembre, seguimos sin saber nada. Creo que están jugando con nosotros”.
“En la primera semana de marzo –ha continuado José Carlos Jiménez- sabemos que hubo una reunión en el Ayuntamiento de Alcalá, donde estuvo representada la empresa Alto Guadalquivir, directores del SAS y alcaldía, y parece ser que se dedujo que se abrían las urgencias inmediatamente, y de hecho el día 6, a profesionales del SAS, en el centro de salud, se les explicaron cómo iban las urgencias y cómo iban a ser, así como la función de ellos. Un sindicato, mediante una nota de prensa, ese mismo día, informaba que la empresa, a través de su directora en Alcalá, había informado de que las urgencias se abrían ya. Todavía estamos esperando”. “El último contacto tenía lugar el lunes santo, cuando la consejera de Salud, Mª José Sánchez, quien nos volvía a decir que las urgencias no podían abrirse aún porque estaban estudiando los presupuestos, cuando cuatro meses antes se habían aprobado unos presupuestos en los que no nos incluyeron. Creemos que siguen jugando con nosotros”.
“La consejera –ha añadido Jiménez- ha dicho en varias ocasiones que la mayoría estamos trabajando. Por supuesto que estamos trabajando, lo estamos haciendo al 40%, al 60%, al 80%, un día aquí, otro allí. Claro que tenemos que trabajar, tenemos familias a las que darle de comer. Pero que la gran mayoría se hayan incorporado es otra cosa incierta, ya que en Alcalá se sacaron 63 plazas y quedan por incorporar 31 personas, es decir, casi el 50%”.
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